El video presenta a dos adolescentes traviesos que son atrapados en el acto de robar en tiendas. Son atrapados por su empleador, quien los lleva a su oficina y los atrapa comprando ropa. Luego los lleva a casa y los hace usar su ropa mientras aún la tiene puesta. Los adolescentes se turnan para tener sexo con él y ambos gimen de placer. La cámara captura cada detalle de su encuentro, desde la forma en que sus cuerpos se retorcen de éxtasis hasta la forma en que su cabello cae alrededor de sus cuellos.