Toby estaba a punto de obtener su llenado de Kittina cuando de repente le hizo señas para que se detuviera.Siendo el caballero que es, él se obligó, dándole tiempo suficiente para prepararse para un viaje salvaje.Nada más estar lista, no perdió tiempo en tomar el control, a horcajadas en Toby y cabalgándolo con un fervor que lo dejó completamente hechizado.La intensidad de su encuentro solo se amplificó por el hecho de que era su primera vez participando en actividades carnales de este tipo.A pesar de ser una novicia en el ámbito del juego anal, el ansia de Kittininas por probarlo era evidente en sus ojos ansiosos e invitando al lenguaje corporal.Toby, siempre el participante dispuesto, obligado, tomándola con un firvor que la dejaba jadeando por respiración.La intensidad del encuentro solo se incrementó por el hecho que fue su primera vez explorando el mundo del placer anal.