Mi pareja y yo siempre hemos sido abiertos sobre nuestros deseos sexuales, pero nunca esperábamos llevarlo tan lejos.Decidimos animar las cosas introduciendo un juguete masivo de 12 pulgadas en nuestros momentos íntimos.La anticipación era palpable mientras nos disponíamos a compartir esta nueva experiencia.Cuando mi esposa se acostó en la cama, posicioné el juguete dentro de ella, listo para que mi amiga sumisa se uniera a nosotros.La vista de su placer fue intoxicante, y me encontré anhelando más.Tomé mi turno, reviviendo la sensación mientras el juguete me llenaba.La vista que mi esposa observaba, su excitación era evidente, solo avivaba nuestro deseo.Nos turnamos el uso del juguete, nuestros gemidos resonaban en la habitación.El clímax fue intenso, dejándonos a ambos satisfechos y ansiosos por más.Esta nueva adición a nuestro repertorio sexual nos ha acercado, y no podemos esperar a explorar más juguetes juntos en el futuro.