Una mujer rusa casada estaba aburrida en casa cuando su marido la llamó de imprevisto.Le dio instrucciones para que se desnudara y lo esperara.Como ella esperaba, un desconocido llamó al timbre.Intrigada, lo dejó pasar, y preguntó si era ella la que estaba al teléfono con su esposo.Cuando confirmó, reveló que era amigo de su marido y había sido enviado por él.La mujer, siendo toda una puta, no perdió tiempo en ofrecerle su coño y chupar su monstruosa polla.Le dio placer con su boca, manos y coño, todo mientras su esposo estaba al teléfono.La emoción de ser pillada y la emoción del engaño le hicieron experimentar aún más intensamente.El clímax de su encuentro fue cuando él cubrió sus grandes tetas con su cálida leche.