El vídeo presenta a un joven oficinista que está atrapado robando una pulsera de la joyería.El dueño de la tienda, al no querer presentar cargos, le ofrece al obrero un trato: sexo por libertad.El obrero, al estar desesperado por la pulsera y por la libertad que le daría, acepta el trato.La escena se desarrolla en el garaje de la vidriera, donde el obrero está obligado a practicar sexo oral en el dueño de la misma.El propietario de la misma utiliza la cámara de la CCTV para grabar todo el evento, asegurándose de que el obrera nunca olvidará el trato que hizo.El vídeo está lleno de contenido explícito, incluyendo la mamada y el sexo en el trabajo.Se ve que el joven obrero se muestra ansioso y dispuesto a hacer lo que sea para conseguir la pulsera, y la libertad que este le traería.