El video presenta a una chica pequeña que vive en el mismo edificio que el operador de cámara. La cámara la captura desnuda mientras le hace una mamada hardcore a su vecina. La chica luego pasa a la posición del misionero, donde está restringida y domina a su pareja. La trama se centra en el aspecto voyeurismo del video, con el operador de cámara espiando a la chica de al lado en sus momentos más íntimos. La chica es retratada como una adolescente de entre 18 y 19 años, lo que aumenta la emoción del video. La naturaleza áspera y hardcore del video seguramente satisfará a aquellos que buscan contenido extremo. La cámara oculta agrega un elemento de emoción al video, ya que el espectador no es consciente de la presencia de chicas hasta que ella comienza a actuar.