La escena comienza con Bella Rose y Leah Lee, dos adolescentes pequeñas y cachondas de 18-19 años, entrando a hurtadillas en una casa. Vestidas con jeans ajustados y camisetas, parecen listas para asumir cualquier desafío que se les presente. Al entrar en la casa, se encuentran con un anciano que claramente no los espera. Él está sorprendido y confundido, pero Bella y Leah no se molestan. Ellos toman el control de la situación, y el anciano es rápidamente sacado de la casa. Mientras exploran la casa, se encuentran con un grupo de jóvenes adolescentes que también están allí para una noche salvaje de sexo. Las chicas se sienten inmediatamente atraídas por ellas, y comienzan a coquetear y provocarlas. Las chicas están decididas a hacer lo que quieran con todos en la casa, y no tienen miedo de tomar lo que quieren.