En este video, se ve a un joven árabe disfrutando de un baño relajante en su baño. Mientras se jabona el cuerpo, comienza a sentirse excitado y comienza a acariciar su polla. La cámara se acerca a su mano mientras continúa masturbándose, su respiración se vuelve más difícil. Gime suavemente mientras se acerca al orgasmo. Finalmente, se corre fuerte, su polla se contrae y late antes de hundirse de nuevo en el baño. El video termina con él lavando su cuerpo y secándose con una toalla. Está claro que este hombre musulmán está muy cómodo con su sexualidad y disfruta explorándola en privado. Este video es un gran ejemplo de cómo los hombres musulmanes pueden ser tan activos sexualmente como sus contrapartes occidentales, mientras mantienen sus valores culturales y religiosos.