El video presenta a un repartidor de pizza francés que tiene la suerte de ser recogido por su compañero de entrega. Comienza mostrando su impresionante físico y luego pasa a una acción de juego de roles caliente. El repartidor está vestido con lencería, lo que agrega emoción a la escena. Mientras el repartidor toma el control, comienza a jugar consigo mismo, usando sus manos para acariciar su pizza mientras gime de placer. El momento más afortunado del repartidor llega cuando recibe una llamada de otro repartidor que puede entregarle su pizza. Los dos tienen un encuentro apasionado que los deja satisfechos. El video termina con el repartidor tomando su pedido y comiendo la boca del repartidor.