El video presenta a una impresionante mujer llamada Alesha, que es una prostituta. Se la ve acostada en su cama, usando solo lencería y medias. Su pareja entra en la habitación y comienza a besarla apasionadamente. Luego, usa un gran consolador para penetrar su coño, lo que ella acepta ansiosamente. A medida que continúa complaciéndose con el consolador, gime más fuerte e intensamente. La cámara se acerca a su cara mientras jadea y se ahoga con el consolador, disfrutando claramente de cada momento. Finalmente, saca y inserta otro consolador en su coño, que ella usa para estimularse aún más. La escena termina con ella alcanzando el orgasmo y colapsando en la cama.