Mientras recorría el teléfono de mis maridos, me topé con un video de nuestra criada, Lina Nakamura, dándole placer.Me sorprendió al ver su garganta profunda y el tamaño de su monstruosa verga.Estaba claro que esto no era solo una cosa única; sus encuentros eran frecuentes.Ambos me sorprendí y excité con la revelación, ya que nunca había sospechado nada de esto detrás de mis esposos.La vista de Linas de marco pequeño y tetas naturales que luchaban por acomodar su enorme miembro era demasiado para manejar.El hecho de que estuviera disfrutando con otra mujer solo se sumó a la complejidad de nuestra relación.Como dama madura y una dedicada milf, me encontré cuestionando mis propios deseos y los límites de nuestro matrimonio.Este incidente abrió un mundo completamente nuevo de posibilidades para mí, y no pude evitar preguntarme si mis necesidades de maridos estaban siendo completamente satisfechas en casa.