Mi hijastra, una sexy bomba brasileña con grandes tetas naturales, acababa de mudarse a la ciudad.Cuando la pillé en el garaje dándole una garganta profunda a un negro, sabía que las cosas se iban a poner salvajes.La confronté, pero ella solo se lo rio, diciendo que todo era parte de su trabajo como enfermera.Pero la cosa peor se dio cuando trajo esa verga monstruosa a casa.La vista de ella de rodillas, tomando esa enorme verga negra en su boca, fue suficiente para enviarme al hospital.No pude creer mis ojos mientras manejaba esa enorme polla negra como una profesional.Pero fue demasiado para ella, y se derrumbó en el suelo, jadeando por aliento.Fue un espectáculo para contemplar, y no pude evitar preguntarme qué otros secretos tenía mi hijastra escondida debajo de sus grandes y hermosas tetas.