Al fin había llegado el día para nuestra primera vez explorando el mundo de la paja con los pies.Mi novia, una impresionante chica de 18-19 años con un gran culo, estaba más que lista para enfrentar el desafío.Cuando nos acogimos en el sofá, no pude evitar ser atraída hacia sus pies, y me encontré acariciando mi polla dura contra sus suaves e invitadoras plantas.La sensación fue intensa, y podía sentir cada nervio en mi cuerpo siendo estimulado.Era una vista para contemplar ya que habilidosamente usaba sus pies para darme placer, sus diminutas manos sosteniéndome estable mientras trabajaba su magia.Los primeros planos capturaban cada detalle, por la forma en que sus dedos de los pies se envolvieron alrededor de mí a las expresiones de puro éxtasis en su cara.Fue un viaje salvaje, uno que me dejó sin aliento y suplicando por más.