No soy tu típico chico, pero la forma en que mi suegro y yo nos pusimos anoche fue definitivamente fuera de lo normal.Mi suegro tenía un poco de problema con su terapeuta, y pensó que sería mejor si lo ayudaba.Entonces, ahí estábamos, el viejo y yo, en la oficina de los terapeuticos, tratando de averiguar qué estaba pasando.La cosa tomó un giro un poco extraño cuando el terapeútico comenzó a ponerse un poco demasiado amistoso con mi suegra.Eso es cuando decidí entrar y asumir el control.Le di una mamada que ella no olvidaría pronto, y luego pasamos al evento principal.El terapeutista definitivamente estaba interesado en ello, y ella se aseguró de dejarme saber cuánto lo estaba disfrutando.Era un viaje salvaje, pero tengo que admitir, era un poco caliente.