Un hombre estaba al teléfono con su amante, consiguiendo que ella gimiera fuerte mientras él la complacía.De repente, el esposo de su novia entró y las pilló en pleno acto, lo que generó una acalorada confrontación.Sin embargo, el hombre logró calmar la situación, asegurando al esposo que era solo un escenario de sexo telefónico inofensivo.El esposo, satisfecho con la explicación, salió de la habitación, dejando solos al hombre y a su amante.En cuanto la costa estuvo despejada, el hombre no perdió tiempo en meter su miembro palpitante en su ansiosa boca, capturando cada momento en su teléfono.La vista de su retorcimiento en el placer, combinado con el sonido de sus gemidos haciendo eco a través de la habitación solo sirvió para intensificar su deseo.Después procedió a hundir su monstruosa polla profundamente en ella, provocando aún más gritos de éxtasis.Este es un encuentro que sin duda será grabado en sus recuerdos durante mucho tiempo.