Después de una noche salvaje de fiesta, estaba ansioso por tener algo de acción.Le puse el ojo en a esta chica toda la noche, y ahora era el momento de hacer mi movimiento.Cuando volvimos a su lugar, no pude resistir las ganas de tenerla.Llegamos, y no perdí tiempo en ponerme manos a la obra.Comencé sumergiéndome en sus pliegues húmedos, explorando cada centímetro de su dulce coño con mi lengua.Ella gemía de placer mientras yo la golpeaba, llevándola a lo bestia con deseo.Luego, la hice voltear y hundí mi miembro palpitante en ella.La vista de su squirting me excitó aún más, y sabía que tenía que correrme dentro de ella.Con una embestida final, solté mi carga, llenándola de mi semen caliente.Era una noche que nunca olvidaría, y espero que ella tampoco lo logre.