Antes de embarcarnos en una aventura en la playa, mi amiga y yo decidimos darle sabor a las cosas en el hotel.Invitamos a su novio a que nos acompañara para un trío caliente.La habitación se encargó de la anticipación mientras todos nos desnudamos, revelando nuestros deseos ansiosos.Nuestras habilidades amateur no obstaculizaron nuestro entusiasmo mientras nos íbamos turnando para darnos placer, nuestros gemidos resonando en las paredes.La cámara capturaba cada momento de nuestro encuentro salvaje, desde los besos apasionados hasta las mamadas sensuales.La vista de mi amiga siendo doblemente penetrada encendió un nuevo nivel de lujuria, lo que llevó a un final climático que nos dejó a todos sin aliento.Este trío inolvidable fue un comienzo perfecto para nuestra escapada al sol.