Un chico japonés salta a un taxi, con los nervios al borde.El conductor, un negro musculoso, revela un secreto impactante: la policía lo tiene en cámara de velocidad y el joven pasajero está en grave peligro.Ante la amenaza de la deportación, el asiático no tiene otra opción que sucumbir a las demandas de los conductores.Lo que sigue es un encuentro salvaje y crudo en los confines estrechos del taxi.El miembro grueso del negro empuja profundamente en el ansioso agujero asiático, el paseo duro e implacable.El chico asiático lo toma todo a paso, sus gemidos resonando en la tranquila noche.Las manos expertas de los conductores exploran el cuerpo delgado de las asiáticas, su pasión encendiendo el aire.El hombre asiático se monta a horcajadas sobre el negro, sus tetas naturales brillando bajo las luces de la calle.La vista del coche de la policía mostrando sus luces solo agrega combustible a su ardiente encuentro.Este es un cuento de chantaje, miedo y lujuria cruda, primordial, todo ambientado en la parte trasera de un taxi en una noche de lunares.